José Martabid Optimismo Colaboración y Compromiso

Una instancia de tan alta complejidad nos debe servir para repensar muchas cosas. Sin duda, el momento más duro pasará y tendremos nuevas oportunidades.
Volverá el normal funcionamiento de instituciones públicas, bancos y empresas, lo que permitirá retomar el empuje y ordenar la casa.

Vivimos un momento muy duro, donde todos estamos perdiendo algo. En el caso inmobiliario por ejemplo, ya veníamos con márgenes estrechos, falta de liquidez y demanda disminuida. 
Ahora el COVID-19 nos deja en un escenario de alta complejidad.

Como empresario, valoro las medidas tributarias y financieras que buscan un escenario más beneficioso para las pymes y medianas empresas; mejorando su liquidez y crédito, principalmente.
Lo importante es lograr que esa ayuda llegue ahora y no en dos o tres meses más, de tal forma de darle oxígeno a las empresas con sus compromisos inmediatos.

Viene una gran desaceleración en abril y mayo, con caídas importantes en las ventas.
La Cámara Chilena de la Construcción CChC pronostica una caída interanual del 50% en las transacciones de vivienda durante el resto del 2020, suponiendo un levantamiento de las restricciones a mitad de año. 
El retorno será lento, dada la duración del proceso de compra de una casa o propiedad; de hecho, hay un plazo de cinco meses para que las ventas generen ingresos.   

OPTIMISMO FRENTE AL DURO ESCENARIO

    Por ser La Araucanía una región muy dependiente de la inversión pública, es muy importante que el estamento publico adapte sus procedimientos a la brevedad, cambiando formas de operar, implementando la entrega de información en forma electrónica y no por papel, para así agilizar los procesos de pago
    Una instancia de tan alta complejidad nos debe servir para repensar muchas cosas. Sin duda, el momento más duro pasará y tendremos nuevas oportunidades.

Volverá el normal funcionamiento de instituciones públicas, bancos y empresas, lo que permitirá retomar el empuje y ordenar la casa.
Pese a las cifras, quiero compartir una visión de optimismo, colaboración y compromiso frente al duro escenario.  
  En lo personal, un empresario debe estar comprometido con un futuro sostenible, mediante nuevas oportunidades de innovar, crear mejores ciudades y mejores ambientes para las familias.

Nuestro entorno debe pensarse a largo plazo; por ahora nuestra responsabilidad es la protección de las personas, con una alta cuota de sensatez y seriedad. 

COLABORACIÓN Y COMPROMISO

   En el caso de la construcción, nuestros proyectos son de mediano y largo plazo; hay etapas de hasta 60 meses, por lo que tenemos un compromiso de alta complejidad en la entrega, proceso que debe ser sostenible.
    Por eso, algunas obras críticas han debido continuar, con una alta cuota de compromiso y colaboración del sector construcción.
   Ante ese deber, me gustaría hacer un llamado a todos quienes trabajan actualmente en obras, para que respeten con total apego el protocolo sanitario.
    Se trata de un compromiso, adquirido por los socios de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), al inicio de esta crisis sanitaria.  

Algunas recomendaciones de la CChC:

  • Distribuir la jornada en diversos turnos y diferir horarios de ingreso y salida de los trabajadores, para cuidar su salud y sus fuentes laborales. 
  • Desarrollar protocolos para monitorear el estado de salud de los trabajadores y para actuar ante la sospecha de un posible contagio. 
  • Implementar todas las medidas de higiene y de distanciamiento que sean necesarias al inicio, durante y al término de la jornada, incluyendo traslados. 
  • Cambiar todos los hábitos y rutinas que sean necesarios para evitar la propagación de la enfermedad durante el desempeño de las actividades laborales. 
  • Mantener informados permanentemente a todos los trabajadores de la empresa respecto de las medidas preventivas recomendadas para evitar contagios. 
  • Dar las facilidades necesarias para garantizar la permanencia en sus hogares de todas las personas que estén en situación de mayor vulnerabilidad. 
  • Mantener un diálogo permanente con los trabajadores para ir evaluando en conjunto la situación y llegar a acuerdos con estricto apego a la legalidad vigente. 

El cumplimiento de este protocolo sanitario exige a cada empresario y ejecutivo ejercer un liderazgo permanente, tanto en obras o faenas, como respecto a sus equipos de trabajo.
El propósito es asegurar el rápido y efectivo cambio conductual que demanda la compleja crisis que hoy enfrenta Chile, producto del COVID-19.

 José Miguel Martabid Razazi, Empresario Inmobiliario.

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